Tras informe de mejoras en su salud
El papa Francisco, de 88 años, continúa su recuperación tras la grave neumonía bilateral que lo mantuvo hospitalizado más de cinco semanas, y su salud muestra “ligeras mejorías”, según informó este viernes 4 de abril el Vaticano. La Santa Sede indicó avances en la respiración, la motricidad y el uso de la voz del pontífice, lo que abre la posibilidad de una eventual reaparición pública durante la tradicional oración del Ángelus este domingo 6 de abril, aunque en un formato diferente. Aunque su estado sigue siendo delicado y bajo estricta observación médica, los análisis de sangre recientes han arrojado resultados positivos, y se ha reducido gradualmente el uso de oxígeno, lo que permite cierto optimismo en medio de la convalecencia.
Desde que fue dado de alta el pasado 23 de marzo, Francisco permanece en la Casa Santa Marta, su residencia en el Vaticano, donde divide su tiempo entre el tratamiento médico, sesiones de fisioterapia y la gestión de los asuntos de la Iglesia. Su recuperación ha sido descrita como “lenta pero progresiva”, especialmente en lo que respecta a su capacidad motora, ya limitada antes de la hospitalización. Aunque no ha recibido visitas especiales, se mantiene en contacto con sus colaboradores y ha seguido, vía videoconferencia, eventos religiosos recientes como la misa por el 20 aniversario de la muerte de Juan Pablo II y el sermón de Cuaresma del padre Roberto Pasolini. Su estado de ánimo es bueno, y continúa consumiendo alimentos sólidos sin complicaciones.
Pese a los signos positivos, la Santa Sede considera prematuro confirmar su participación en las próximas celebraciones de Semana Santa, incluida la Misa de Pascua, la festividad más importante del calendario cristiano. La Oficina de Prensa aclaró que cualquier decisión al respecto se tomará en función de la evolución de su estado de salud. Mientras tanto, las actividades eclesiásticas vinculadas al Jubileo de los Enfermos y del Mundo de la Salud se desarrollarán este fin de semana sin la presencia del pontífice, aunque su homilía será leída por monseñor Rino Fisichella. La situación médica de Jorge Bergoglio continúa siendo monitoreada por un equipo conjunto del Hospital Gemelli y de la Dirección de Salud del Vaticano, que trabajan en turnos permanentes para garantizar su pronta y segura recuperación.