Solo necesaria cuando hay transmisión activa
La acción de control larvario se trata de la inspección de las casas para realizar el tratamiento larvicida «piriproxifen» en los recipientes donde la ciudadanía almacena agua. El método está aprobado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). El inspector de salud educa a los habitantes en la identificación y eliminación de potenciales criaderos de zancudos mediante la ficha de autoevaluación “10 minutos contra el dengue”.
La fumigación es una intervención necesaria solo cuando hay una transmisión activa y se requiere eliminar al zancudo en su fase adulto o de vuelo. Antes de la actividad, el Ministerio de Salud (Minsa) recomienda cerrar las ventanas y abrir las puertas, manteniendo las cortinas recogidas, liberar los espacios donde se desplegará el fumigador.
También aconseja cubrir los alimentos, depósitos con agua, enseres y peceras. La cocina y artefactos deberán estar apagados para evitar accidentes. Todos los integrantes de la familia y las mascotas deben salir de la vivienda y permanecer afuera al menos 1 hora. El Minsa pide a los vecinos que permitan el ingreso del personal de salud durante el desarrollo de las actividades.